Amante del arte y profesional de la educación, Sandra Carmona representa a una mujer gitana luchadora, comprometida y valiente, que aprovecha las oportunidades que la vida le ofrece para luchar por una sociedad donde las mujeres gitanas no tengan que estar constantemente afrontando el racismo de una sociedad excluyente.
Sandra Carmona, al igual que muchas jóvenes gitanas, tuvo que anteponer el trabajo a los estudios. Sin embargo, tenía muy claro que quería estudiar y encontró tiempo para acudir a las clases del bachillerato nocturno hasta llegar a la universidad. Y aunque bellas artes era su gran pasión, decidió elegir la carrera de educación. “Siempre he estado muy ligada a lo social, siempre me ha gustado mucho la educación, siempre he creído que la educación es la herramienta básica para transformar la sociedad, y para que la sociedad no deje de transformarse”.
Su paso por la carrera de educación no fue en vano, sirvió para forjar su visión del mundo y reforzar su pasión por el arte. “Siempre me he decantado por la educación y por el arte, para buscar un poco el sentido de la crítica. En educación te das cuenta de que todo está muy manipulado y que las escuelas lo único que hacen es reproducir un sistema injusto sin….